Rafael Rodríguez-Solano, director jurídico de International SOS (en España SOS Seguros y Reaseguros, S.A. y SOS Assistance España, S.A.U).
El seguro de Defensa Jurídica cada vez tiene una mayor aceptación entre los autónomos y los pequeños empresarios porque se han dado cuenta de que necesitan ayuda externa para abordar el extenso marco jurídico que regula la actividad de las empresas en España. Además, el hecho de que el Gobierno esté estudiando la posible exclusión de las tasas judiciales para pymes y autónomos, “animará a los asegurados a reclamar sus derechos en la vía judicial porque, al no tener que pagar las tasas judiciales, los límites de sus garantías serán más altos y tendrán más margen de defensa”, explica Rafael Rodríguez-Solano, director jurídico de International SOS.ENTREVISTA PUBLICADA EN LA REVISTA PYMESEGUROS Nº 47
Según datos de ICEA, en 2014 el ramo de Defensa Jurídica creció un 3,24%. ¿Cómo se espera que se comporte este año?
En 2015 el ramo seguirá en expansión, tanto a nivel individual como colectivo. Los asegurados van conociendo la utilidad del servicio que damos y lo valoran más. Este año seguirá la tendencia marcada en años anteriores. Aunque es difícil establecer un porcentaje concreto, en los últimos años está teniendo un crecimiento sostenido y pensamos que se mantendrá. Hay que tener en cuenta que en otros países europeos, este ramo está más desarrollado y eso nos hace pensar que aún tiene mucho desarrollo en España. La gente se está dando cuenta de que tiene que estar apoyada y protegida porque cada vez hay más ataques externos. Sobre todo en países como España donde la legislación cambia a menudo.
Desde hace años se habla del potencial de este ramo ¿cree que sigue existiendo?
El potencial sigue existiendo porque es un ramo joven, que era poco conocido hasta hace unos años. La crisis económica iniciada en España en 2007 y la necesidad de atacarla en distintas áreas de negocio y en la vida privada de las personas físicas, ha contribuido a su creciente valoración. Las personas se han dado cuenta de lo necesario que es este ramo. La crisis ha contribuido a que se potenciara el uso de este seguro y que los profesionales del sector valoraran más el producto y lo recomendaran a sus clientes.
Parece que se ha notado que a raíz de la crisis la problemática ha cambiado…
Hemos percibido una mayor conciencia, tanto en empresas como en particulares, de la necesidad de contar con un seguro de este tipo. Una situación económica de crisis como la que hemos vivido los últimos años, conlleva incertidumbre, temor a perder el empleo, en las pymes a no poder cobrar algunos créditos, a no poder asumir el coste de un posible proceso judicial, etc.
¿A cree que es debido el repunte que se está produciendo en la demanda del seguro de Defensa Jurídica en el colectivo de las pymes, comercios y autónomos?
Los autónomos y los pequeños empresarios no tienen los medios de las grandes empresas. Por eso, necesitan ayuda externa que, por otra parte, no suponga un gran coste añadido a los propios de su actividad. Esta demanda de servicios profesionales se ha convertido en una necesidad, teniendo en cuenta el extenso marco jurídico que regula la actividad de las empresas en España. Tanto ellos como los profesionales del sector se han dado cuenta de la ayuda que les proporciona este tipo de seguros.
¿Cómo se está comportando la siniestralidad?
Se mantiene estable en líneas generales, pero con algunos matices. Hemos notado que se van produciendo cambios en la utilización de las distintas garantías que normalmente vienen marcados por factores externos. La economía es quizás el factor externo que, de mayor manera, marca las distintas tendencias en el uso y demanda de las diferentes garantías. A principio de la crisis se utilizaban más unas coberturas de la póliza y a medida que ha ido pasando, se están utilizando otras. Pero el cómputo general es que la siniestralidad se mantiene. Quizás está subiendo algo, pero muy poco a poco.
¿En este momento, qué se demanda más en Defensa Jurídica los seguros individuales o los colectivos?
En nuestra compañía, los colectivos, porque desde el inicio de la actividad del ramo la orientación del mismo se dirigió a los grandes
colectivos. Desde hace poco tiempo estamos ampliando el negocio y hemos empezado la venta y distribución de seguros individuales de Defensa Jurídica. Pero aún su proporción es baja en nuestro caso.¿El aumento de las transacciones electrónicas está suponiendo una mayor demanda de los seguros de Defensa Jurídica?
Entre las empresas, todavía no estamos notando el impacto del comercio electrónico porque nuestro perfil de cliente no lo utiliza demasiado. Pero donde sí percibimos un cambio es entre particulares. Cada vez nos plantean más situaciones relacionadas con la Red, tanto por compras en internet como por conflictos que tienen su origen en Redes Sociales, con especial trascendencia en los casos de acoso a menores en la Red.
El Gobierno estudia excluir del pago de las tasas judiciales a autónomos y pymes. ¿Cómo va a influir esto en el seguro?
Animará a los asegurados a reclamar sus derechos en la vía judicial porque al no tener que pagar las tasas judiciales, los límites de sus garantías serán más altos y tendrán más margen de defensa. Eso es lo que ha pasado con las personas físicas, que ya las tienen eliminadas. Las cantidades que no pagas por tasas se pueden dedicar a asuntos puramente jurídicos.
Hay corredores que piensan que cuando el seguro de Defensa Jurídica va como complemento de otros seguros no se le da el valor que tiene. ¿Considera que es bueno para este ramo que se venda junto con otros seguros?
Es un seguro muy especializado y se puede vender de manera individual o como complemento de otros seguros. Pero en ambos casos hay que explicarlo de forma individualizada y dándole el valor que tiene, que es intrínseco, complementario al del seguro principal. No es un mero acompañante de un seguro principal porque tiene su propia importancia.
¿Cree que es necesario diseñar un producto específico para cada actividad empresarial para adaptarse a cada necesidad?
No es necesario crear un producto nuevo para cada una de las posibles necesidades que se puedan plantear. El seguro de Defensa Jurídica, considerado en sentido amplio, con todas sus posibles coberturas, es muy modulable y se puede adaptar a cada situación. De esa forma, podemos ofrecer un producto muy amplio o más restringido.
Alguna aseguradora está comercializando un microseguro de Defensa Jurídica. ¿Cree que tiene futuro ese tipo de seguros?
Los microseguros en Defensa Jurídica no creo que sean muy eficaces. Si hay que litigar, es necesario tener coberturas extensas y límites altos porque la administración de justicia no es barata, la vía judicial requiere capacidad económica y hay que tener en cuenta la posibilidad de una condena en costas y lo que ello conlleva a nivel económico.
¿International SOS va a sacar algún nuevo producto de Defensa Jurídica el próximo año?
Acabamos de presentar, para colectivos, un producto de elaboración de Testamento Jurídico y Voluntades Vitales online y próximamente lo lanzaremos en otros canales. Se trata de un producto desarrollado internamente en el que han trabajado nuestros equipos jurídico, médico e informático. Además tenemos en estudio un par de productos que pueden ir dirigidos a pymes y autónomos, pero aún no queremos adelantar nada.
¿La Defensa Jurídica es idónea para venderla por Internet?
Tal vez internet no sea el medio más idóneo para la comercialización de este tipo de seguros, pero somos conscientes de que existe esta demanda y por eso estamos ahí. Quizás es más adecuado para familias, que contratan un producto más estándar, pero no para pymes, donde se necesita el asesoramiento de un corredor.
Los corredores siguen viendo a la Defensa Jurídica como un producto complementario
Rafael Rodríguez-Solano, director jurídico de International SOS (en España SOS Seguros y Reaseguros, S.A. y SOS Assistance España, S.A.U), piensa que “Defensa Jurídica es un producto cada vez más atractivo para los corredores de seguros, tanto a nivel individual como colectivo. Muchas pymes conciben a su corredor como un gestor de riesgos y éste es uno de los riesgos fundamentales que una empresa debe cubrir. Si hablamos de particulares, saber que el corredor prevé este tipo de situaciones refuerza su posición como un asesor de confianza”. El problema es que los corredores de seguros no lo consideran un ramo prioritario y se preocupan más de vender los obligatorios. “Aunque empiezan a conocerlo y a valorar su importancia, todavía lo ven como un producto complementario”, afirma Rodríguez-Solano.A su favor tiene que no se necesita una gran especialización por parte del broker para vender este producto. “Además, los corredores son un gremio con un alto nivel de especialización y formación, por lo que este tipo de productos aseguradores no les plantea grandes problemas”, explica del director jurídico de International SOS.
Desde la entidad, se pide a los corredores una colaboración activa en la selección de riesgos y buena información sobre el producto al cliente. Que hagan un estudio serio y pormenorizado de su cartera de clientes. A cambio, se ofrece un servicio de calidad tanto a sus clientes finales como al propio mediador. Su herramienta web para corredores está expresamente diseñada para que puedan emitir productos online.
El hecho de que la importancia del negocio de esta entidad sea en el reaseguro, hace que el porcentaje de negocio distribuido a través de corredores de seguros aún sea bajo. Pero Rafael Rodríguez-Solano confía “en su potencial de crecimiento. Somos conscientes de que los mediadores nos aportan ventajas en cuanto a una mejor selección del seguro adecuado para cada cliente. Además, es un colaborador en la delimitación de riesgos y en la gestión y tramitación de siniestros. De hecho, cada vez estamos trabajando más con corredores”.
www.pymeseguros.com